¿De qué se habla en Cannes hoy?
Fue un día sin una conversación clara y dominante. Sólo la habitual sobre el cansancio ya insoportable tras haber superado el ecuador del Festival y ver ya el final. A tres días y un puñado de películas, aún quedan grandes títulos por ver, pero las quinielas han empezado y las listas de favoritas y más odiadas.También fue un día de decepciones, había muchas esperanzas puestas en los Dardenne y en Dolan, pero ninguno de ellos triunfó en el Palais. Ni siquiera sus fans más acérrimos pudieron defenderlas ampliamente.
¿Qué hemos visto?
La fille inconnue, de los hermanos Dardenne. Los directores belgas son unos mimados del Festival, con razón. Y con sus dos Palmas bajo el brazo, más otros premios, vienen a Cannes por séptima vez con esta película, casi un detectivesco, una de las más flojas de su carrera. Aunque no fallida. La desconocida del título es una chica negra que llama a la puerta de un gabinete médico ya tarde en la noche y no le abren. A la mañana siguiente se la han encontrado muerta, pero no conocen su identidad. Cuando la doctora ve las imágenes de ella llamando a su puerta y cómo deliberadamente no quiso abrirla porque era tarde, emprende un viaje de limpieza de su culpa convirtiéndose en una detective para descubrir su identidad. La solidaridad y el compromiso social están, como otras veces, en ese viaje, pero la mirada fría de la doctora y de la propia profundidad de la historia es inédita en el trabajo de los belgas.
Captain Fantastic, de Matt Ross. Venía con buenas críticas desde Sundance. Pero ya se sabe que uno no de puede fiar de lo que se diga en el festival de Utah. Sin embargo, esta roadtrip familiar que puede recordar a Pequeña Miss Sunshine en ocasiones, fue una divertida y comprometida sorpresa. Un entretenimiento con mucho mensaje y con un Viggo Mortensen en su salsa, como protagonista, como padre antisistema de seis hijos con los que vive en las montañas retirados de todo. Allí les ha convertido en genios intelectuales y en cazadores, pero cuando tienen que ir al mundo real a velar a su madre, son torpes socialmente y se plantean los métodos de educación que les han dado.
It’s Only The End of The World, de Xavier Dolan. Si los Dardenne fue una decepción, Dolan fue otra. Hubo aplausos y algunos abucheos en el primer pase de prensa que estaba a reventar de gente (mucha se quedó fuera). El niño terrible del cine presentaba su sexta película a los 26 años. La primera llena de estrellas del cine francés. Gaspard Ulliel, Nathalie Baye, Léa Seydoux, Marion Cotillard y Vincent Cassel interpretan a una familia altamente disfuncional y gritona, tensa en conversaciones a voces, en las que Dolan nos introduce mirando fijamente a sus rostros. Ulliel es el hermano pequeño que vuelve a casa después de 12 años sin verlos, y llega para contarles que se muere. Al llegar se encuentra con una hermana a la que apenas conoció (Seydoux) y una cuñada que jamás había visto (Cotillard en un nuevo registro de víctima), pero su madre (Baye) y su hermano abusón (Cassel) siguen igual. Basada en una obra de teatro, Dolan mantiene la estructura teatral, y se la lleva a su terreno pop, subiendo la música hasta arriba (quizá la escena del Dragostea Din Tei sea la mejor). Actualiza el melodrama familiar, pero a costa de nuestros nervios.
¿Qué te has perdido?
Ma’Rosa, de Brillante Mendoza. Ayer me arriesgué a no verla para poder escribir (y pasar por la fiesta de Julieta, soy sincera) y esperaba las reacciones para recuperarla hoy. Han sido tan negativas, que la he borrado de la lista y aprovechado a ver otras. After the Storm, de Hirokazu Kore-eda; y La tortue rouge, de Michael Dudok De Witt, la única de animación en competición. Ambas de Un certain regard se solapaban con las entrevistas. La lástima es que ya no las recuperaré porque el tiempo aquí se va acabando.¿Qué has comido?
Milanesa con pasta. Por fin. Ese plato combinado tan popular en Cannes que si está bien hecho es delicioso y da calorías para aguantar el día entero. Aunque ya que estábamos, después de las tensiones modernas de Dolan, me entró el hambre y me comí una pizza Spéciale (jamón, rúcula y pesto) en La Potinière, un restaurante clásico en frente del Palais por que el que todos pasamos en algún momento a lo largo del festival.¿Con quién has hablado?
Con Matt Ross y Viggo Mortensen sobre Captain Fantastic. Sobre arriesgarse a tomar decisiones aunque puedas fallar, como hace su personaje. Sobre paternidad y educación. Y lo ha confirmado: no vive en un árbol. Bromeó. “La gente cree que vivo en lo alto de un árbol en mitad de una isla desierta. Supongo que lo piensan por cosas que cogen de entrevistas aquí y allí y de mis personajes”, decía. Con este padre hippie lo pensarán más. También hablé con tres de los hijos: Samantha Isler, Nicholas Hamilton y Annalise Basso sobre cuánto les ha cambiado esta película.¿Qué esperas de la jornada de mañana?
Mi último día completo en Cannes. El viernes por la mañana abandono este lugar, con ganas (el agotamiento aprieta) y pena (aún me pierdo algún título interesante, como la de Paul Verhoeven). Después de un paso porMi despedida va a ser The Neon Demon, y no parece que vaya a ser un final feliz para mí. Se oyen terrores de la nueva de Winding Refn.Palmómetro
Ante la decepción con Dolan, mi Palma sigue siendo para Toni Erdmann o Paterson, pero hay prensa empeñada en que aún podría ser American Honey la ganadora. Donde sí estamos de acuerdo todos es en que Sonia Braga podría ser la mejor actriz por su papel en Aquarius.
Via:Cinemania
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