Si el manchego hubiera aceptado rodarla, la historia de Heath Ledger y
Jake Gyllenhaal hubiera sido mucho menos romántica y mucho más física
Subjetividades aparte, está claro que Pedro Almodóvar sigue siendo uno de los pocos directores españoles cuyos estrenos suponen acontecimientos tanto dentro como fuera de nuestro país. De ahí que, ahora que su Julieta llega al mercado internacional, el manchego tenga muchas citas con la prensa. Sin ir más lejos, su participación en el podcast de la revista Empire le ha servido para hablar de sus votos para los Oscar (Carol como Mejor Película, El club como Mejor Película de Habla No Inglesa), de sus próximos proyectos (“Tengo dos ideas, y mi siguiente película será una de las dos: una comedia muy, muy negra, o un drama en la línea de Julieta”) y, también, de cómo hubiera sido Brokeback Mountain si la hubiera dirigido él en lugar de Ang Lee.
Como es sabido, Almodóvar estuvo a punto de hacerse cargo de aquella historia de amor entre Heath Ledger y Jake Gyllenhaal que marcó un antes y un después en la representación de la homosexualidad en el cine mainstream. Y, aunque reconoce los méritos de la cinta del taiwanés (una de las mejores películas del siglo XXI, según BBC Culture), afirma que su versión hubiera sido bastante distinta. ¿Cuál hubiese sido la principal diferencia? “La mía habría tenido mucho más sexo”, explica Almodóvar. “Y no hubiera sido gratuito: la historia original de Annie Proulx trata sobre una relación física, una relación animal. Así que el sexo es necesario, porque es el cuerpo de la historia. Yo tenía esa imagen: dos tíos que empiezan a hacer el amor como animales, como si fuera una forma de sobrevivir al frío de la montaña”.
Que nadie se eche las manos a la cabeza aún, porque Almodóvar también tiene en cuenta el lado romántico del relato: “Al final, los dos descubren que aquello era algo más, y eso les sorprende: es como un gran accidente. Pero la historia habla de la parte física”. Finalmente, el autor de La ley del deseo remacha su postura: “Me encanta la película y me encantan los actores, creo que estuvieron increíbles, pero yo pienso en Annie Proulx, y no en Hollywood, y creo que mi visión no era fácil de llevar a cabo”.
Via:cinemania
Subjetividades aparte, está claro que Pedro Almodóvar sigue siendo uno de los pocos directores españoles cuyos estrenos suponen acontecimientos tanto dentro como fuera de nuestro país. De ahí que, ahora que su Julieta llega al mercado internacional, el manchego tenga muchas citas con la prensa. Sin ir más lejos, su participación en el podcast de la revista Empire le ha servido para hablar de sus votos para los Oscar (Carol como Mejor Película, El club como Mejor Película de Habla No Inglesa), de sus próximos proyectos (“Tengo dos ideas, y mi siguiente película será una de las dos: una comedia muy, muy negra, o un drama en la línea de Julieta”) y, también, de cómo hubiera sido Brokeback Mountain si la hubiera dirigido él en lugar de Ang Lee.
Como es sabido, Almodóvar estuvo a punto de hacerse cargo de aquella historia de amor entre Heath Ledger y Jake Gyllenhaal que marcó un antes y un después en la representación de la homosexualidad en el cine mainstream. Y, aunque reconoce los méritos de la cinta del taiwanés (una de las mejores películas del siglo XXI, según BBC Culture), afirma que su versión hubiera sido bastante distinta. ¿Cuál hubiese sido la principal diferencia? “La mía habría tenido mucho más sexo”, explica Almodóvar. “Y no hubiera sido gratuito: la historia original de Annie Proulx trata sobre una relación física, una relación animal. Así que el sexo es necesario, porque es el cuerpo de la historia. Yo tenía esa imagen: dos tíos que empiezan a hacer el amor como animales, como si fuera una forma de sobrevivir al frío de la montaña”.
Que nadie se eche las manos a la cabeza aún, porque Almodóvar también tiene en cuenta el lado romántico del relato: “Al final, los dos descubren que aquello era algo más, y eso les sorprende: es como un gran accidente. Pero la historia habla de la parte física”. Finalmente, el autor de La ley del deseo remacha su postura: “Me encanta la película y me encantan los actores, creo que estuvieron increíbles, pero yo pienso en Annie Proulx, y no en Hollywood, y creo que mi visión no era fácil de llevar a cabo”.
Via:cinemania
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