El estreno de ‘
Animales fantásticos y dónde encontrarlos’ (Fantastic Animals and Where to Find Them, 2016) nos ha recordado que en las siete entregas de la saga
Harry Potter había una colección enorme de
criaturas, seres mágicos, monstruos y animales fantásticos que bien podrían figurar en la nueva película de
David Yates. Es probable que encontráramos alguno más, pero esta selección es bastante representativa.
Criaturas ultrapoderosas que pueden desaparecer y aparecer entre
llamas, portar mucho peso, producir lágrimas que pueden curar y
regenerarse después de muertos. Son rojos y del tamaño de un pavo, y
como en su acepción mitológica, pueden echar a arder y renacer de sus
propias cenizas.
En singular
inferius, son básicamente
zombies revividos por un mago.
Cuerpos poseídos que no sienten dolor, no se puede matar lo que está
muerto y estos cadáveres son como marionetas en manos del mago que los
convoca.
La primera criatura que vemos en el universo
Harry Potter.
Los búhos que viven entre los magos poseen el poder de de entregar el
correo sin necesitar la dirección del destinatario. Se pueden utilizar
ciertos conjuros para
evitar ser encontrado por uno de ellos. La preciosa lechuza de Harry se llama
Hedwig.
De las familias de las sirenas, que también están en el universo
Potter, pero no llegan a aparecer físicamente, estas criaturas acuáticas son mucho menos bonitas. De hecho son
bastante temibles. Son procedentes de escocia y viven en el
lago negro de Hogwarts. Son mucho más peligrosas y dan unos gritos que espantan. En el lago también viven
los voraces demonios de agua.
Pese a sus malas pulgas, los duendes
coexisten con brujas y magos,
pueden practicar magia sin necesidad de utilizar varitas y poseen su
propio lenguaje, el duendigonza.El primero de los duendes con los que se
encuentra Harry es en la primera visita al mundo mágico, cuando va en
busca de material escolar para
Hogwarts. No confundir con los molestos
duendecillos de cornualles.
No son iguales que los de las películas que todos conocemos, algunos pueden controlar sus tendencias voiolentas y vivir entre los magos. Si que se transforman con la
luna llena y se contagian por su mordedura, aunque un muggle no sobreviviría a esta.
Hay un par de gatos mágicos en la saga original. Por una parte
la señora Norris de Argus Filch y el de
Hermione.
Su poderes no son exactamente tales, pero está claro que no son mininos
como los que ves en instagram. El de Filch es capaz de pillar a
estudiantes desobedientes y
chivárselo. El de Hermione es capaz de comunicarse con
Sirius Black en forma de perro.
Cuerpo, patas traseras y cola de caballo, patas delanteras, cabeza y alas de águila.
Criaturas orgullosas, hay que mantener el contacto visual constantemente con ellas, sin siquiera pestañear. Gracias a uno de ellos,
Harry logra salvar a Sirius Black de un dementor.
Hogwarts tiene su propia
comunidad de fantasmas y uno de los más conocidos es el fantasma sin cabeza de Nick, que aunque le pega un buen susto a Ron, es
más gracioso que inofensivo, como todos los espectros de este tipo del universo Potter.
Pueden volar y atravesar paredes, les afectan los hechizos y los Muggles no pueden convertirse en uno de ellos.
Los seres más espeluznantes de todo el universo Potter. Se alimentan de la felicidad de los humanos y dejan a sus víctimas desesperadas en un estado de
depresión profunda. Para ello dan el llamado
beso del dementor, con el que chupan el alma. Un destino peor que la muerte.
El
perro de tres cabezas sacado de la mitología griega, originalmente cuidaba de la puerta del hades, pero e
n el universo Potter cuida de la piedra filosofal de Hogwarts. Es temible pero le gusta mucho la música, tanto que
una nana con un harpa encantada le deja totalmente frito.
Otra criatura mítica, esta presentada básicamente
en forma de serpiente gigante. Pueden vivir cientos de años y matan a la gente que tiene delante con tan solo mirarlas.
Como las gorgonas, te convierten en piedra. Además poseen un veneno muy poderoso.
Seres
tan gigantes y violentos como estúpidos,
pueden alcanzar una tonelada de peso y hasta cuatro metros. En una
ocasión, el profesor Quirrell dejó uno suelto por Hogwarts para
despistar a todos mientras roba la piedra filosofal, pero Harry y los
suyos consiguen reducirle. También
existen razas de gigantes, seres algo menos deformes.
Pues a pesar de que los magos se empeñan e
ponerle nombres raro a todos los bichos, esto no es más que una
tarántula gigante. Se alimentan de humanos y
tienen un veneno letal. También saben hablar perfecto inglés.
Probablemente
la criatura mágica más majestuosa de la saga. Nacen con color dorado, se van poniendo de color plateado hasta que en su estado final quedan
completamente blancos. Su sangre puede revivir a los muertos, pero la persona que revive estará maldito.
Lord Voldemort es resucitado con la sangre de dos de ellos. También existen caballos alados y
más macabros Thestral.
Tradicionalmente
tratados como esclavos en el mundo de los magos, permanecer
leales a su amo hasta que una prenda les libera. Mientras van con un harapo y
se autocastigan si hacen algo en contra de los deseos de su amo. Una
existencia bastante cruel.
Otra criatura mitológica, con parte humana en el tronco y parte de caballo a partir de la cintura. Son
asombrosamente listos y viven en
los bosques prohibidos de los alredores de Hogwarts. Uno de ellos salva a Harry de Voldemort.
Planta mortífera que crece en la oscuridad y ambientes húmedos. Pueden
estrangular a humanos hasta la muerte, y como es habitual en estos caso, cuanto más te mueves más aprieta, por lo que es
mejor relajarse y no intentar huir. Huyen de la luz. Otras plantas con vida son las
madrágoras y los sauces boxeadores.
Hay** muchos dragones** desperdigados durante la saga, desde
Norberto, una cría de Ridgebak Noruego hasta cuatro especies diferentes
más. El más temible es el que aparece en
el torneo de los tres magos pero el más imponente es el
Ironbelly Ucraniano de la última de la saga.
Via:blog de cine
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