Navidad, el día de Pascua, Noche vieja, el día del Padre… No se salva
ninguna, todas tienen su propia película que casi siempre es un
desastre. Analizamos caso a caso.
Feliz día de [rellena este espacio con lo que se te ocurra]. Hay festividades de todo tipo y para todos los gustos: el día del amor, de la familia, el día del beso, el día de consumir a tope, el día de… Bueno, muchos. Por otro lado el cine se ha propuesto hacer una película por cada uno de ellos, la cosa empezó por las festividades más tradicionales como Navidad o Pascua pero ahora cualquier día es válido para escribir un guión (casi siempre mediocre) y dirigir una película (casi siempre de consumo rápido).
¿Por qué a Hollywood le ha dado por repasar el calendario festivo?
¿Es esto una moda pasajera o estamos ante una nueva tendencia
convertida en subgénero cinematográfico? Lo mejor será analizar el
fenómeno festividad a festividad, película a película.
Hollywood aún no ha tocado esta festividad debido a que no es una tradición anglosajona. Así que nos libramos de una película donde los Reyes Magos salven a la humanidad de un peligro extraterrestre con sus poderes especiales. Porque efectivamente si en Hollywood alguien hiciera una película sobre los tres Reyes Magos de Oriente estaría más cerca del género superheroico que del histórico. Y me temo que los protagonistas serían bastante más caucásicos de lo que son originalmente estos Reyes de la Biblia.
Pero en España, donde aún celebramos este día con mucha ilusión, no nos hemos podido resistir a hacer nuestra propia película. Se titula Los reyes magos, es de animación y está dirigida por Antonio Navarro.
¿Por qué no nos gusta? Aunque aquí hacemos buena animación hay una cosa que todavía no nos entra en la cabeza y es que el cine de dibujos pueda ser consumido por los más pequeños y también por los más mayores de la casa. Los reyes magos es una película tan infantil que es imposible no morir de aburrimiento si tienes más de 5 años. Cine para muy muy pequeños que no asume ningún riesgo. Cine vago.
Tenemos Titanic, tenemos Pretty Woman, tenemos Oficial y Caballero, tenemos Ghost y tenemos un millar de ejemplos más de películas hiperrománticas para ver abrazados a nuestra pareja el día de San Valentín. ¿Era necesario una película que se titulara expresamente con el nombre de la festividad? Parece que sí, que era necesario, y encima de historias cruzadas, para que nos sintamos identificados a la fuerza y encima con Julia Roberts… Eso ya es jugar sucio.
La película en cuestión se titula Historias de San Valentín y es de Garry Marshall, del que seguiremos hablando más adelante. Cinco piezas muy románticas protagonizadas por actores y actrices de relumbrón como la ya nombrada Roberts, Ashton Kutcher, Jamie Foxx, Anne Hathaway, Shirley MacLaine, Jessica Biel, Bradley Cooper…
¿Por qué no nos gusta? ¿Hay algo más dulce que el merengue? Sí, esta película. Empalaga tanto que ni siquiera el aluvión de caras conocidas alivia el empacho de ver durante dos horas gente enamorándose muy fuerte todo el rato. No hay conflicto, no hay intriga, no hay emoción…
Podríamos incluir todas las películas sobre Jesús pero son demasiadas y además no relatan concrétamente la festividad de Pascua, sino lo que se conmemora. Por otro lado también podríamos habernos fijado en la irreverente película de Harmony Korine, Spring Breakers, sobre las vacaciones de primavera, sin embargo Korine se sale de la tangente demasiado rápido para firmar una obra atípica. Así que lo mejor será quedarnos con una película donde haya huevos de pascua.
La elegida es Hop, película de animación 3D en la que un vago en paro llamado Fred debe de albergar a un Conejito de Pascua herido hasta que se recupere. El invitado le hará pasar los peores días de su vida.
¿Por qué no nos gusta? Aunque es una película bastante entretenida y que goza de buen ritmo su argumento es tan absurdo (en el peor sentido) que acaba por convertirse en una cinta demasiado boba incluso para los más pequeños. Eso sí, técnicamente es una delicia.
Las películas sobre el día del padre se remontan a 1930, cine entrañable sobre la paternidad hecho en Hollywood por la gran MGM. Pero… ¿qué tiene esta festividad para poder sacar de ella tantos argumentos distintos? Las relaciones paterno filiales siempre son muy agradecidas en pantalla grande pero cada vez que van relacionadas con esta festividad se vuelven cursis, esto es una verdad como un templo. Si Nebraska de Alexander Payne se titulara El día del padre sería un rollo y sin embargo es una de las cintas que mejor reflejan esta relación.
Teníamos para elegir muchos títulos, como Un lío padre de Robin Williams y Billy Crystal pero hemos decidido quedarnos en la serie B de Father’s Day, la película que firman y dirigen Adam Brooks, Jeremy Gillespie, Matthew Kennedy y Conor Sweeeney, una comedia con mucha sangre y mucha acción en la que un tipo (el mismísimo Adam Brooks) busca vengarse de un violador que mató a su padre.
¿Por qué no nos gusta? Por su vinculación con la festividad, de cualquier otra forma y con cualquier otro título la película se habría convertido en una obra de culto. De esta forma es irremediable evitar la cursilería. Una pena.
Del día de la madre no hay tantos títulos como del día del Padre y ni falta que hace porque viene a ser la misma festividad ñoña y sin mucho sentido. Pero, obviamente, menos sentido tienen las películas que dedican dos años de trabajo, entre producción y rodaje a elaborar historias (siempre igual de edulcoradas) alrededor de esta festividad.
Feliz día de la madre es el ejemplo perfecto de cinta hecha para conmemorar este día. Una comedia romántica (aquí la relación materno filial pasa a un segundo plano) con historias cruzadas y en la que trabajan unas cuantas (muchas) estrellas de Hollywood: Julia Roberts, Jennifer Aniston, Kate Hudson, Hilary Duff…
¿Por qué no nos gusta? Porque es la prueba de que Garry Marshall, director de Pretty Woman o Princesa por sorpresa se ha vuelto muy, muy perezoso. Pensadlo, sus últimas tres películas son Historias de San Valentín, Noche de fin de año y Feliz día de la madre… ¿En serio? ¿Era necesario?
Halloween quizá sea una excepción porque gracias a esta festividad tenemos unas cuantas películas que son obras maestras o de culto, como La noche de Halloween y Pesadilla antes de Navidad. Sin embargo, la avaricia rompe el saco y Hollywood se ha empeñado tantas veces en repetir la fórmula que ya cansa.
Sobre la noche de los muertes hay películas de todo tipo, de intriga, terror, comedia… pero la que nos interesa por su clara intención de ser solo un producto de usar y tirar es Truco o trato: Terror en Halloween.
¿Por qué no nos gusta? A veces es una comedia, a veces es un thriller y a veces es un drama. La película se pierde constantemente en un guión enrevesado donde como no podía ser de otra forma hay historias cruzadas y donde los fantasmas se mezclan con los asesinos y los sucesos paranormales.
Si, una simple cena con un pavo también da para mucho cine. Cine lleno de tópicos eso sí, reuniones familiares, indigestiones varias, bromas de cuñado, frío invernal, el amor, la amistad… ya sabéis.
Steve Martin y John Candy son dos pesos pesados que también protagonizaron su propia película de Acción de Gracias, Mejor solo que mal acompañado, una road movie en la que un ejecutivo de publicidad (Martin) que regresa a casa por Acción de Gracias tropieza con un vendedor de cortinas de baño muy bocazas (Candy) que le hará pasar el peor viaje de su vida.
¿Por qué no nos gusta? A ver, dentro del género ‘Steve Martin’ es un buen título pero resulta tan previsible que pierde toda la gracia que tiene. Ni siquiera el mítico John Candy consigue animar el cotarro.
Esta fiesta es, probablemente, a la que Hollywood haya dedicado más películas. Las navidades nos pone sensibles, nos pone románticos, somos más buenos, mejores personas, más tolerantes y nos tragamos cualquier cosa que pongan en las carteleras.
Sobre el día de navidad hay todo tipo de géneros, desde el thriller hasta la comedia pasando por el drama más trágico. Tenemos papás noeles que se han hecho míticos y unos cuantos seres despreciables que odian la navidad más que tú. Pero hay algo pero que titular a una película Navidades, ¿bien o en familia?
¿Por qué no nos gusta? Aclaremos que el título original no tienen nada que ver con la horrenda traducción, Love the Coopers, pero aun así pocas películas han conseguido juntar tantos tópicos sobre Nochebuena en tan pocos minutos. A nadie le interesan las películas sobre familias acomodadas con líos pero con encanto.
Esta fiesta, la última noche del año, también es una de las más recurrentes para conseguir momentos de gran emotividad en el cine. Sin embargo, nadie conseguirá igualar la emocionante partida de cartas entre Jack Lemmon y Shirley MacLaine que Billy Wilder rodó para El apartamento. Desde entonces todo (o casi todo) el metraje rodado sobre ‘esta noche mágica’ es insustancial.
Y la pregunta es ¿qué necesidad tenía nuestro amigo Garry Marshall para rodar Noche de fin de año? Más historias cruzadas y más actores de altísima altura como Michelle Pfeiffer, Zac Efron, Robert De Niro, Halle Berry, Jessica Biel, Sofía Vergara que se enamoran y se desenamoran, fracasan y triunfan el día de las campanadas.
¿Por qué no nos gusta? Nadie en esta película tiene química, no hay ni un ápice de originalidad en el guión, los actores están ahí con las mismas ganas que el público de un programa de fin de año…
Via:cinemania
Feliz día de [rellena este espacio con lo que se te ocurra]. Hay festividades de todo tipo y para todos los gustos: el día del amor, de la familia, el día del beso, el día de consumir a tope, el día de… Bueno, muchos. Por otro lado el cine se ha propuesto hacer una película por cada uno de ellos, la cosa empezó por las festividades más tradicionales como Navidad o Pascua pero ahora cualquier día es válido para escribir un guión (casi siempre mediocre) y dirigir una película (casi siempre de consumo rápido).
Día de Reyes [6 de enero]
Hollywood aún no ha tocado esta festividad debido a que no es una tradición anglosajona. Así que nos libramos de una película donde los Reyes Magos salven a la humanidad de un peligro extraterrestre con sus poderes especiales. Porque efectivamente si en Hollywood alguien hiciera una película sobre los tres Reyes Magos de Oriente estaría más cerca del género superheroico que del histórico. Y me temo que los protagonistas serían bastante más caucásicos de lo que son originalmente estos Reyes de la Biblia.
Pero en España, donde aún celebramos este día con mucha ilusión, no nos hemos podido resistir a hacer nuestra propia película. Se titula Los reyes magos, es de animación y está dirigida por Antonio Navarro.
¿Por qué no nos gusta? Aunque aquí hacemos buena animación hay una cosa que todavía no nos entra en la cabeza y es que el cine de dibujos pueda ser consumido por los más pequeños y también por los más mayores de la casa. Los reyes magos es una película tan infantil que es imposible no morir de aburrimiento si tienes más de 5 años. Cine para muy muy pequeños que no asume ningún riesgo. Cine vago.
San Valentin [14 de febrero]
Tenemos Titanic, tenemos Pretty Woman, tenemos Oficial y Caballero, tenemos Ghost y tenemos un millar de ejemplos más de películas hiperrománticas para ver abrazados a nuestra pareja el día de San Valentín. ¿Era necesario una película que se titulara expresamente con el nombre de la festividad? Parece que sí, que era necesario, y encima de historias cruzadas, para que nos sintamos identificados a la fuerza y encima con Julia Roberts… Eso ya es jugar sucio.
La película en cuestión se titula Historias de San Valentín y es de Garry Marshall, del que seguiremos hablando más adelante. Cinco piezas muy románticas protagonizadas por actores y actrices de relumbrón como la ya nombrada Roberts, Ashton Kutcher, Jamie Foxx, Anne Hathaway, Shirley MacLaine, Jessica Biel, Bradley Cooper…
¿Por qué no nos gusta? ¿Hay algo más dulce que el merengue? Sí, esta película. Empalaga tanto que ni siquiera el aluvión de caras conocidas alivia el empacho de ver durante dos horas gente enamorándose muy fuerte todo el rato. No hay conflicto, no hay intriga, no hay emoción…
Domingo de Pascua [marzo-abril]
Podríamos incluir todas las películas sobre Jesús pero son demasiadas y además no relatan concrétamente la festividad de Pascua, sino lo que se conmemora. Por otro lado también podríamos habernos fijado en la irreverente película de Harmony Korine, Spring Breakers, sobre las vacaciones de primavera, sin embargo Korine se sale de la tangente demasiado rápido para firmar una obra atípica. Así que lo mejor será quedarnos con una película donde haya huevos de pascua.
La elegida es Hop, película de animación 3D en la que un vago en paro llamado Fred debe de albergar a un Conejito de Pascua herido hasta que se recupere. El invitado le hará pasar los peores días de su vida.
¿Por qué no nos gusta? Aunque es una película bastante entretenida y que goza de buen ritmo su argumento es tan absurdo (en el peor sentido) que acaba por convertirse en una cinta demasiado boba incluso para los más pequeños. Eso sí, técnicamente es una delicia.
Día del Padre [19 de marzo]
Las películas sobre el día del padre se remontan a 1930, cine entrañable sobre la paternidad hecho en Hollywood por la gran MGM. Pero… ¿qué tiene esta festividad para poder sacar de ella tantos argumentos distintos? Las relaciones paterno filiales siempre son muy agradecidas en pantalla grande pero cada vez que van relacionadas con esta festividad se vuelven cursis, esto es una verdad como un templo. Si Nebraska de Alexander Payne se titulara El día del padre sería un rollo y sin embargo es una de las cintas que mejor reflejan esta relación.
Teníamos para elegir muchos títulos, como Un lío padre de Robin Williams y Billy Crystal pero hemos decidido quedarnos en la serie B de Father’s Day, la película que firman y dirigen Adam Brooks, Jeremy Gillespie, Matthew Kennedy y Conor Sweeeney, una comedia con mucha sangre y mucha acción en la que un tipo (el mismísimo Adam Brooks) busca vengarse de un violador que mató a su padre.
¿Por qué no nos gusta? Por su vinculación con la festividad, de cualquier otra forma y con cualquier otro título la película se habría convertido en una obra de culto. De esta forma es irremediable evitar la cursilería. Una pena.
Día de la Madre [1 de mayo]
Del día de la madre no hay tantos títulos como del día del Padre y ni falta que hace porque viene a ser la misma festividad ñoña y sin mucho sentido. Pero, obviamente, menos sentido tienen las películas que dedican dos años de trabajo, entre producción y rodaje a elaborar historias (siempre igual de edulcoradas) alrededor de esta festividad.
Feliz día de la madre es el ejemplo perfecto de cinta hecha para conmemorar este día. Una comedia romántica (aquí la relación materno filial pasa a un segundo plano) con historias cruzadas y en la que trabajan unas cuantas (muchas) estrellas de Hollywood: Julia Roberts, Jennifer Aniston, Kate Hudson, Hilary Duff…
¿Por qué no nos gusta? Porque es la prueba de que Garry Marshall, director de Pretty Woman o Princesa por sorpresa se ha vuelto muy, muy perezoso. Pensadlo, sus últimas tres películas son Historias de San Valentín, Noche de fin de año y Feliz día de la madre… ¿En serio? ¿Era necesario?
Halloween [31 de octubre]
Halloween quizá sea una excepción porque gracias a esta festividad tenemos unas cuantas películas que son obras maestras o de culto, como La noche de Halloween y Pesadilla antes de Navidad. Sin embargo, la avaricia rompe el saco y Hollywood se ha empeñado tantas veces en repetir la fórmula que ya cansa.
Sobre la noche de los muertes hay películas de todo tipo, de intriga, terror, comedia… pero la que nos interesa por su clara intención de ser solo un producto de usar y tirar es Truco o trato: Terror en Halloween.
¿Por qué no nos gusta? A veces es una comedia, a veces es un thriller y a veces es un drama. La película se pierde constantemente en un guión enrevesado donde como no podía ser de otra forma hay historias cruzadas y donde los fantasmas se mezclan con los asesinos y los sucesos paranormales.
Acción de Gracias [Cuarto jueves de noviembre]
Si, una simple cena con un pavo también da para mucho cine. Cine lleno de tópicos eso sí, reuniones familiares, indigestiones varias, bromas de cuñado, frío invernal, el amor, la amistad… ya sabéis.
Steve Martin y John Candy son dos pesos pesados que también protagonizaron su propia película de Acción de Gracias, Mejor solo que mal acompañado, una road movie en la que un ejecutivo de publicidad (Martin) que regresa a casa por Acción de Gracias tropieza con un vendedor de cortinas de baño muy bocazas (Candy) que le hará pasar el peor viaje de su vida.
¿Por qué no nos gusta? A ver, dentro del género ‘Steve Martin’ es un buen título pero resulta tan previsible que pierde toda la gracia que tiene. Ni siquiera el mítico John Candy consigue animar el cotarro.
Navidad [25 de diciembre]
Esta fiesta es, probablemente, a la que Hollywood haya dedicado más películas. Las navidades nos pone sensibles, nos pone románticos, somos más buenos, mejores personas, más tolerantes y nos tragamos cualquier cosa que pongan en las carteleras.
Sobre el día de navidad hay todo tipo de géneros, desde el thriller hasta la comedia pasando por el drama más trágico. Tenemos papás noeles que se han hecho míticos y unos cuantos seres despreciables que odian la navidad más que tú. Pero hay algo pero que titular a una película Navidades, ¿bien o en familia?
¿Por qué no nos gusta? Aclaremos que el título original no tienen nada que ver con la horrenda traducción, Love the Coopers, pero aun así pocas películas han conseguido juntar tantos tópicos sobre Nochebuena en tan pocos minutos. A nadie le interesan las películas sobre familias acomodadas con líos pero con encanto.
Fin de año [31 de diciembre]
Esta fiesta, la última noche del año, también es una de las más recurrentes para conseguir momentos de gran emotividad en el cine. Sin embargo, nadie conseguirá igualar la emocionante partida de cartas entre Jack Lemmon y Shirley MacLaine que Billy Wilder rodó para El apartamento. Desde entonces todo (o casi todo) el metraje rodado sobre ‘esta noche mágica’ es insustancial.
Y la pregunta es ¿qué necesidad tenía nuestro amigo Garry Marshall para rodar Noche de fin de año? Más historias cruzadas y más actores de altísima altura como Michelle Pfeiffer, Zac Efron, Robert De Niro, Halle Berry, Jessica Biel, Sofía Vergara que se enamoran y se desenamoran, fracasan y triunfan el día de las campanadas.
¿Por qué no nos gusta? Nadie en esta película tiene química, no hay ni un ápice de originalidad en el guión, los actores están ahí con las mismas ganas que el público de un programa de fin de año…
Via:cinemania
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