La desconcertante película sobre una araña alienígena devoradora de semen. Dura menos de 1 hora y acaba de estrenarse en streaming
Los que se quejan de que "ya no se hace nada original en cine" deberían asomarse al género de serie B, donde las propuestas locas están a la orden del día. Por si su argumento sobre una tarántula alienígena devoradora de semen no fuera lo suficientemente llamativo, el desarrollo de 'Mamántula' es igual de desconcertante y por fin está disponible en streaming.
Araña asesina del espacio exterior
Una investigadora sigue unos misteriosos asesinatos que asolan la ciudad, en los que varios cadáveres de hombres homosexuales han aparecido como si los hubieran vaciado por dentro. El responsable es una araña alienígena gigante disfrazada de humano que se ha infiltrado entre las personas para saciar su sed de sangre y semen.
'Mamántula' es un mediometraje de 49 minutos dirigido por Ion de Sosa ('Sueñan los androides'), que también coescribe el guion junto a Mamen Díaz y Violeta Rodríguez. Tras ser exhibida en festivales como San Sebastián o Sitges, se estrena en Filmin el 21 de junio.
Inclasificable es la mejor palabra para definir esta película, tanto para lo bueno como para lo malo. Y ni siquiera estoy incluyendo la disparatada premisa de ese ser alienígena que se alimenta de sangre y semen (realmente loca, pero eso es algo habitual dentro del pozo underground), sino cómo esta se lleva a cabo.
Con ese planteamiento, lo lógico es esperar un tono juguetón y mucho humor negro (¿cómo tomárselo en serio?), pero el humor y la autoconsciencia hacen poco acto de presencia en su metraje de menos de una hora. La frase más divertida la leemos en el subtítulo de una de las arañas alienígenas, y resulta hilarante precisamente porque hasta ese momento el humor brillaba por su ausencia.
Esa falta de humor hace que también cueste un poco ubicar la película mientras la estamos viendo: la historia arranca con una escena de sexo muy explícita, narrada de forma bastante plástica, y luego tiene un giro a lo grotesco, a partir del cual se inicia la trama detectivesca.
Así pues, por un lado tenemos una dirección que se desmarca de la dirección plana que suele caracterizar los procedimentales (el cineasta cita 'Expediente X' y 'Se ha escrito un crimen' como referentes para la estructura de la trama policíaca) y tiene su sello de autor, pero choca de frente con otros elementos de la historia que no terminan de estar en la misma frecuencia de onda.
Empezando por la extraña mezcla entre lo explícito y fetichista de las escenas de sexo, que resultan incómodas de ver porque sabes desde el principio que esas van a ser las víctimas que perecerán violentamente por la mano (¿la pata?) de Mamántula.
Pero si algo descoloca en este mediometraje son los actores. Cuando están callados aún pueden dar el pego, pero en cuanto dicen sus líneas te saca completamente de la película y te dificulta mucho creer cualquier cosa que digan. Eso unido a todo lo anterior y el enfatizar más la parte dramática de la historia hace que, en más de una ocasión, no tengas muy claro qué tipo de película estás viendo, ni si es una maravilla o un desastre absoluto.
Con todas sus virtudes y defectos, no se puede negar que 'Mamántula' te atrapa en su red desde el principio y te mantiene enganchada de principio a fin en su desconcertante cóctel de thriller, erotismo y delirios de serie B. Una experiencia única que, aunque solo sea por la cantidad de sentimientos contradictorios que te despierta, merece la pena.
Texto: Carla Monfort Foto/Via: Espinof
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